Obtener una licencia de terraza es uno de los trámites administrativos que más interesan a quienes tienen un negocio de restauración. Contar con terraza implica disponer de más espacio para atender clientes. Además, las mesas y sillas colocadas en exteriores funcionan muy bien a la hora de atraer clientela, especialmente cuando hace buen tiempo.
La particularidad de las terrazas de bares, restaurantes y cafeterías es que están ubicadas en la vía pública. Mesas, sillas, sombrillas y carpas ocupan un espacio en la calle, reduciendo a su vez el espacio del que pueden disfrutar los peatones. Precisamente porque se está haciendo un uso privativo de un bien público, es necesario solicitar la licencia para terraza bar y pagar las tasas correspondientes al Ayuntamiento.
Pero no todas las licencias son iguales, podemos distinguir varios tipos:
El propietario tiene permiso para poner la terraza en cualquier época del año.
Permite montar la terraza solo durante una determinada época, que suele ir de marzo a octubre.
Se concede para momentos puntuales como las fiestas patronales o un evento deportivo.