La licencia de cambio de uso consiste en modificar de forma permanente la utilidad habitual de un inmueble. Generalmente convertir un local o establecimiento no habilitado como vivienda en una casa, aunque también podría hacerse al contrario y convertir una vivienda en una oficina.
Pasar un local a vivienda implica obtener la licencia de cambio de uso. No tenerla implica que nadie se va a poder empadronar en la dirección del inmueble, y tampoco se expedirá la cédula de habitabilidad, lo que impedirá la contratación de servicios esenciales como la luz, el agua y el gas.
Además, la tasación de los locales comerciales siempre es más baja que la de las viviendas, y esto puede hacer que el dinero obtenido al ir a solicitar un préstamo hipotecario sobre el inmueble sea inferior.
Por tanto, cuando se hace un cambio de uso es absolutamente necesario contar con la licencia que acredita dicha variación en la utilidad del inmueble. Solo así este tendrá la consideración de vivienda a efectos legales.
No, el proyecto de cambio de uso de local a vivienda no siempre es viable. Para poder hacerlo es esencial que la normativa municipal permita hacerlo y que la vivienda resultante sea acorde a los criterios del Código Técnico de la Edificación (CTE). Esto quiere decir que debe cumplir una serie de requisitos en cuanto a dimensiones, iluminación, ventilación, salida de humos, accesibilidad, etc.
Si se cumplen los requisitos anteriores, lo siguiente que hay que hacer es obtener el permiso de la comunidad de vecinos. Si los estatutos de la comunidad reconocen expresamente la posibilidad de reconvertir un local o establecimiento comercial en una vivienda, no hay ningún problema para hacerlo. Si los estatutos o normas comunitarias no dicen nada, entonces habrá que someter el asunto a la votación de la Junta y que sea esta la que decida.
Si la normativa municipal lo permite, el proyecto de vivienda resultante es acorde al CTE y la comunidad de vecinos ha dado el visto bueno, se puede empezar a trabajar en el cambio de uso de local a vivienda.
Para ello será necesario solicitar en el Ayuntamiento las correspondientes licencias de obras para hacer las reformas. También se solicita la licencia de cambio de uso para poder obtener después la cédula de habitabilidad y que la nueva vivienda sea totalmente legal.